El mito de la clara del huevo

Tomar un licuado por las mañanas con claras de huevo crudas puede ser el peor método para obtener energía. El mejor consejo, cocerlas y luego ingerirlas.

El tres veces campeón nacional de fisicoculturismo Mauricio Morris, por medio de Publimetro, se encargó de tumbar este mito, al asegurar que el cuerpo no absorbe correctamente las proteínas del huevo cuando la clara no está cocinada.

La razón es muy simple: al ser líquida, el cuerpo la elimina como tal, según explicó el atleta.

“Son importantes los huevos, así como otros alimentos ricos en proteínas, pero ojo, muchachos, es un error, un mito. Se tiene que comer cocido”, expresó Morris.

De hecho, el fisicoculturista resaltó que puede resultar hasta daniño para la salud el consumir las claras crudas.

¿En qué radica este error?
—Todo mundo dice que tomes dos claras con soda o leche, pero ojo muchachos, ésas claras de huevos no te hacen el mismo efecto a que si te lo comes cocido.  Además, si la clara viene contaminada te vas a provocar una infección bastante grave, por eso todo el huevo que consumimos tiene que ser cocido. Al ser líquida, el cuerpo la elimina como tal.

Morris, quien aseguró que tiene una ingesta diaria de hasta 20 claras, recomendó a los interesados agregar, además del huevo, pescado y carnes para así obtener una mayor cantidad de proteína.

“Comemos prácticamente a diario, lo mismo: está el huevo, el pescado, el atún. Un servidor come hasta 10 claras y en la noche otras 10”, aseguró.